Ahora bien, hay claramente dos formas de interpretar las obras artísticas: una más superficial y subjetiva, que se basa más bien en nuestra respuesta inmediata a lo que oímos o vemos; y otra más profunda y objetiva, en la que necesitamos un análisis más detallado de los elementos del objeto artístico para llegar a algún tipo de conclusión. En este blog hemos optado siempre, o casi siempre, por la primera opción, entre otras cosas porque para encaminarse por la segunda es necesario un conocimiento sobre la materia mayor del que nosotros tenemos.
En mi humilde opinión, ambos caminos son igual de válidos. No sé cuántas veces habré dicho ya que el hecho de que alguien prefiera a Linkin Park sobre los Beatles no merece ningún tipo de linchamiento público. No tenemos ningún tipo de control sobre esas reacciones inmediatas a las que me refería, así que insultar a una persona que disfruta más de "Crawling" que de "Strawberry Fields Forever" es como insultarle por ser zurdo. ¿Qué culpa tendrá él?
Lo que sí sería motivo de escarnio, probablemente, es que alguien afirme que Linkin Park son mejores que los Beatles, y punto, y ya está. Tal y como eso está expresado, eso es mentira. Y aunque dijera "en mi opinión, Linkin Park son mejores que los Beatles", da igual: esa opinión, por muy libre que seas de expresarla, no tiene validez alguna. Desde un punto de vista analítico y fundamentado en el conocimiento musical, no creo que haya muchos aspectos en los que los de Liverpool se vean superados por los californianos. Y así es, nadie en su sano juicio sería capaz de hacer tal afirmación.
Esto me lleva a otro punto. Parece que decir que algo es arte es el culmen de los elogios, pero no lo es. Ves a miles de personas hablando sobre cuadros abstractos, preguntando: ¿pero esto es arte? Pues claro que lo es. Esa no es la pregunta correcta. ¿Es buen arte? Eso ya es otra cosa. Responder a esta pregunta es el dilema principal de buena parte de la filosofía que hay detrás de la crítica.
Es posible que cada persona tenga una solución distinta al enigma, lo cuál es desafortunado, porque no estaríamos resolviendo el problema de encontrar el germen último de la calidad artística. En mi opinión, en cualquier caso, buen arte es el arte cuyo mensaje (aquel que pretende enviar el artista) se ve correspondido por las decisiones estilísticas del autor, y que por lo general consigue "actualizar esa potencia" de provocar la respuesta que el autor quiere.
Obviamente, cada cual responde a cada cosa como puede. En mi caso, es prácticamente imposible que una canción me conmueva. No sé porqué, igual soy un sociópata, pero así es. Aun así, podemos ser capaces de identificar los elementos utilizados por el artista y el mensaje pretendido, y ver si efectivamente concuerdan. Está claro que la originalidad es un factor importante, pero debe tener su base en esta relación entre mensaje y medio, o entre letras y música, en nuestro caso. Hasta cierto punto, ambas cosas deben ser una unidad, algo que transcienda el mero acto creativo. Algo que vaya más allá.
La razón por la que estoy escribiendo este tocho infumable es que estoy un poco harto. En Facebook, sigo a virtualmente todos los medios musicales importantes del planeta, y como soy masoquista, leo también los comentarios. Y hay unas cuantas opiniones generalizadas que me hacen rabiar como pocas cosas lo consiguen. Aquí intento responder a algunas de ellas:
Hay un género (el rock, por lo general) que es superior al resto
No. Todos los géneros son igual de válidos. ¿Por qué iba a ser el rock mejor que algún otro? Si es porque los músicos son generalmente más hábiles, pierden contra el jazz. Si es porque hay canciones pegadizas, pierden contra el pop. Si es porque gusta a más gente, no sólo te equivocas si no que aunque fuera cierto tu argumento no tendría ningún sentido, entre otras cosas porque los gustos cambian. ¿Es por la actitud rebelde e iconoclasta? Pásate al harsh noise o al dodecafonismo, o algo.
Ningún género es mejor que otro. No hay ningún motivo por el que el heavy metal sea mejor que el reggaeton, y todas las cosas objetables sobre el reggaeton (que hay muchas), no dependen del género en sí si no de sus practicantes. Todos los géneros tienen la capacidad de ser utilizados correctamente para hacer buena música.
Si no compones tus propias canciones, tu música es peor que la de los que sí lo hacen
Esto es absurdo. Si se descubriera que Queen en realidad era todo una farsa creada por una discográfica y que "Bohemian Rhapsody" fue escrita por un compositor asalariado de EMI y que Freddie Mercury jamás puso un dedo en el proceso creativo del tema, ¿disminuiría eso la calidad de la canción? En absoluto. Sería muy decepcionante para la gente a la que le gusta Queen, entre los cuales me incluyo, y a muchos de ellos les sería difícil volver a escuchar la canción sin sentirse engañados, pero la canción sigue siendo la misma. No estamos hablando de quién tiene mayor talento, si no de la música en sí.
Y esto es algo de lo que la gente se queja más que de ninguna otra cosa. "Como Beyoncé tiene un equipo de compositores y productores detrás, su música es basura." ¿Pero de qué me estás hablando? Es una actitud elitista e ignorante al mismo tiempo, lo cuál resulta curioso.
Una variación sobre esta queja es la del sampling, es decir, el uso de fragmentos o ritmos extraídos de otras piezas para tu propia canción. Al parecer, si utilizas samples, tu música también es basura. Eso viene a ser como decir que un arquitecto es un incompetente porque no fabrica sus propios ladrillos.
Si no tocas un instrumento, o bien tu música está basada fundamentalmente en la utilización de un programa de ordenador, no tienes talento y tu música no vale para nada
Esta queja es muy común también. Y el argumento en contra es similar al de los dos puntos anteriores. Si no sabes tocar, al parecer no tienes derecho a ganarte la vida dentro de la música. Aunque sepas cantar. O aunque no sepas cantar, da igual.
En primer lugar, como ya he mencionado, la música es buena o no sea quien sea quien la haga. Que Kanye West, o Morrissey, o Dave Mustaine sean unos auténticos imbéciles insoportables (o no, que yo no les conozco, pero parece ser la opinión de casi todo el mundo en las secciones de comentarios de estos sitios) no impide que la música que hacen sea buena. Entiendo que alguien no quiera darles dinero porque te caen mal, o que se sienta culpable por que su música le guste, pero la calidad de su obra es independiente de su personalidad, de su actitud y, por supuesto, del número de instrumentos que toquen.
Al parecer, la gente suele achacar su rechazo a este tipo de artistas al "mérito". Tiene más mérito que alguien haga como Prince o Dave Grohl y toque todos los instrumentos en un disco. Lo entiendo, y hasta lo comparto en cierta medida. Pero la música es la música, y si es buena, transciende al intérprete, lo quieras o no. Mérito no es igual a talento, y talento no es igual a calidad.
Hay razones válidas para que no te guste la música que hace uso extensivo de efectos o instrumentos sintetizados. Quizá ese toque artificial no sea de tu agrado. Puede que el autotune te resulte desagradable de escuchar. Eso me parece bien. Pero no hay ningún motivo para afirmar que intrínsicamente, ese arte que usa esos recursos es peor que el arte "puro" que se basa únicamente en la habilidad. Es la clásica falacia del "verdadero escocés": se viene abajo cuando te das cuenta de que la "verdadera música" no puede ser reducida a meras reglas arbitrarias.
Abrid la mente, carámbanos.
Abrid la mente, carámbanos.
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