miércoles, 6 de junio de 2018

Judas Priest - Screaming for Vengance (1982)


Cuando Iron Maiden se consolidó como la gran banda del momento con The Number Of The Beast, Judas Priest llevaba ya mucho tiempo picando piedra. Posiblemente sin Judas, Maiden no hubiera encontrado un contexto tan favorable para su explosión. La historia de Judas Priest nos muestra como una banda trata con el tiempo de encontrar su propio estilo, evolucionar, convivir con una situación poco propicia para su estilo y cruzarse toda Gran Bretaña en concierto en concierto hasta encontrar su momento y finalmente convertirse en pioneros tanto en cuestiones musicales como estéticas de todo un género. En 1980 llegó su gran triunfo comercial con su mítico British Steel en el que al ritmo de “Breaking The Law” y otros himnos metaleros dio comienzo a una etapa de de gran éxito y reconocimiento por la crítica y el público.

Un año después publicaron Point of Entry - enfocado sobre todo al mercado estadounidense - que siguió la senda de éxito de su predecesor, aunque no llega a su calidad. Ya instalados en el mainstream, Judas Priest sentía que era una nueva época tanto para la escena musical como para la banda. El cantante Rob Halford proclamó sin complejos: “Es una nueva generación, es una nueva década”. Era su momento, y su siguiente trabajo, Screaming for Vengance, fue una declaración total de intenciones, reivindicándose a ellos mismos, a todo un género musical y a sus seguidores.