miércoles, 25 de mayo de 2011

La buena música

No se me ha ocurrido ninguna genialidad para intentar dar continuidad a esto, así que vamos a lo simple y lo sencillo.

Querría destacar la diferencia, no tan obvia, entre "mi grupo favorito" y "el mejor grupo". En mi caso, mi grupo preferido puede ser Muse, pero si me preguntan por el mejor grupo de la historia, respondería The Beatles sin dudar.

¿Y bien? Esto es un problema para aquellos cerrados de miras musicalmente, que no escuchan nada más que su música y los grupos, y que aquellos que se salgan un poquito de esa línea son irremediablemente malos.

Entiendo que para gustos, colores. A una persona le puede gustar, no sé, pongamos... McFly. Lo respeto, pero no lo comparto, no me gustan. Pero de ahí a que pase a negar la importancia y la calidad de grupos "objetivamente" (entre comillas, porque me refiero a "aceptados universalmente como") mejores como, por ejemplo, Radiohead, hay un paso. A lo mejor es que a la gente le falta la sensibilidad para apreciar lo que hacen estos grupos.
A mí, por ejemplo, no me gusta Joy Division. De hecho, los detesto. Pero, los detesto en MI opinión, y no digo en ningún caso que sean malos. Aprecio lo que hacen, su oscuridad, su ambiente, su increíble influencia en muchísimo de lo que vino después, etc. Y eso es lo que falta, la visión de conjunto en la música: la importancia. Hubo alguien que influyó a Justin Bieber, mal que nos pese, y sólo por eso, ya ha dejado su huella en la historia. Pero lo malo es que a esos no se les recuerda. Todo el mundo se olvida de los pioneros. Nadie sabe quien influyó al que influyó al que influyó (repítase n veces) a los Jonas Brothers.

El otro punto importante que se deriva de todo esto es que la mala música no existe. Existirá la música que no te gusta a tí, o que no me gusta a mí. Sí, a los llamados "melómanos" (yo incluido) no nos gusta nada de lo que ha salido de la factoría Disney últimamente, pero no tiene porqué ser mala música debido a que siempre habrá alguien al que le guste, aunque sea a la propia persona que la ha compuesto. Aunque sea por eso, ya merece la pena.

Pero, volviendo al principio: no se debe cerrar uno en banda. Puede gustarte McFly (se me han acabado los ejemplos nuevos), pero si te recomiendan a otros grupos no puedes desestimarlos simplemente porque no te gusten. Debes escucharlo una vez (recientemente he comenzado a opinar que es mejor con cascos), pensar en lo que escuchas, valorarlo artísticamente, considerando la importancia que ha tenido para otros artístas, volverlo a escuchar, respetar las opiniones de los demás. Finalmente, es muy probable que te acabe gustando.

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1 comentario:

  1. Solo puedo decir (es denigrante que después de tamaña ausencia vuelva con un breve comentario xD) que estoy totalmente de acuerdo contigo, y que puedo ilustrar con un ejemplo propio.

    Personalmente, siempre he odiado Nirvana. Aparte de un par de canciones, que a fuerza de oir constantemente he terminado por aceptar (no digo que me gusten), el resto de su música siempre me ha parecido un coñazo. Pero desde un punto de vista personal. Jamás se me ocurriría negar ni su influencia, ni su calidad.

    Dicho esto, nos vemos en breve en alguna entrada xD.

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